Robert Stirling Newall
Desde joven se dedicó a trabajos técnicos en su ciudad natal, y hacia 1838 era propietario de una empresa de ingeniería. En junio de este mismo año recibió una carta de su amigo Albert Gordon instándole a desarrollar una maquina para confeccionar cables metálicos. Gordon estaba realizado un viaje de estudios por el continente europeo y se quedó impresionado al ver en una mina de Alemania este tipo de cables. Hasta la fecha la cordelería estaba hecha con fibras vegetales como el cáñamo y como es lógico su duración era bastante corta, teniendo que ser substituida frecuentemente. Newall se vio muy interesado en la sugerencia de su amigo y se puso a trabajar en ello, teniendo ya hacia finales del mes de julio un boceto de una maquina capaz de trenzar cables metálicos, que envió a Gordon. Cuando en 1839 Gordon regresó de Alemania, formó una sociedad con Newall y Charles Liddell, y al año siguiente, poco después de que Newall patentara una maquina para la confección de cables, fundaron la compañía R. S. Newall and Co. en la ciudad de Dundee. Una característica fundamental de la máquina diseñada por Newall era que introducía como núcleo del cable cáñamo u otro material flexible que aseguraba la correcta distribución de la tensión en las diversas trenzas del cable metálico. La entrada de Newall en el campo de la telegrafía se produjo después del primer intento por parte de los hermanos Jacob Brett y John W. Brett de unir Inglaterra y Francia mediante un cable submarino. Este cable, tendido en agosto de 1850, estaba compuesto de un simple hilo de cobre aislado con gutapercha, siendo muy vulnerable a cualquier tensión, así que poco después de su tendido se rompió. Según el propio Newall, en septiembre de 1850 envió a los ingenieros de la compañía de los hermanos Brett, la Anglo-French Telegraph Co., una muestra de cable consistente en un hilo central de cobre, aislado con gutapercha y protegido con una estructura metálica trenzada exterior. Sin embargo en julio de 1851 la Anglo-French Telegraph Co. decidió encargar el cable a Edward Weatherley, que tenia una maquina similar a la de Newall para fabricar el cable, empezando el trabajo, pero siendo detenido judicialmente por infringir la patente de Newall; poco después este llegó a un acuerdo con la compañía mediante el cual la R. S. Newall and Co. terminó su fabricación. Este cable estaba compuesto por cuatro hilos de cobre de calibre n.16 Birmingham cubierto cada uno con dos capas de gutapercha de calibre n.1, los cuatro hilos iban unidos, cubriéndose los intersticios con cuerdas de cáñamo. La cubierta exterior estaba formada por diez alambres de hierro galvanizado de calibre n.1 devanados en forma helicoidal. El cable fue tendido en septiembre de 1851 y permaneció en uso durante años. Animado por este éxito, Newall se dedicó tanto a la fabricación de los cables como al tendido de los mismos, recibiendo numerosas solicitudes para la instalación de nuevos cables en Europa y América, y dada su experiencia con la maquinaria de bobinar, también se dedicó a la instalación de equipos en los buques cableros. En febrero de 1857 recibió un pedido para el suministro de la mitad del cable, 1.250 m.n., para el intento, por primera vez , de que una comunicación telegráfica cruzara el Atlántico. Entre 1857 y 1860 colaboró con la firma de William Siemens, la Siemens & Halske; actuando esta compañía como consultora en los proyectos de Newall. A principios de 1868 fundó, con el comerciante danés residente en Newcastle H. G. Erichsen, el empresario Ole B. Suhr, y el banquero Carl F. Tietgen, la Danish-Norwegian-English Telegraph Co., siendo Newall el encargado de suministrar el cable para el tendido de varios cables submarinos entre los países del mar del Norte. El 1 abril de 1868 el gobierno inglés envió al parlamento una ley con el objeto de tomar el control de todas las compañías privadas dedicadas al negocio de la telegrafía, que operaran en suelo británico. En 1870, cuando esta ley entró en vigor, la R. S. Newall instaló su último cable submarino, en concreto el que unía Portpatrick en Escocia y Donaghdee en Irlanda. Después de esto la compañía abandonó completamente los negocios relacionados con los cables submarinos. Newall se casó con la hija del propietario de la Washington Chemical Co., pasando a ser el propietario único de la misma en 1872. También se interesó por la astronomía, poseyendo un telescopio de 635 mm de apertura, que era uno de los más grandes de la época. Fue miembro de numerosas sociedades, entre ellas la Royal Astronomical Society y la Society of Chemical Industry. Fuentes consultadas / Sources Cableships and submarine cables. London, 1978. Submarine telegraphs : their history, construction, and working. London, 1898.
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